PRESENTE: La Muerte
La Muerte es una carta de transformación. Se produce una ruptura definitiva con el pasado, hay un nuevo comienzo ante nosotros.Este cambio puede resultar traumático si nos oponemos a él, como le sucediera al rey en la carta representada en la baraja Rider-Waite. O puede ser un cambio en cierto modo deseado o aceptado, como le sucede al obispo en la misma representación.
Qué duda cabe que la carta de la Muerte puede significar el fallecimiento de alguna persona, o una enfermedad grave. No tiene ni mucho menos que ser el propio consultante, más normalmente se referirá a una persona de su entorno.
Un cambio de ciudad, dejar un trabajo y empezar otro totalmente diferente, acabar con una relación que causaba malestar, son típicas situaciones en que la carta de la Muerte puede aparecer.
AMOR: El Loco
Con el nº 0, el Loco es una carta de posibilidades infinitas. La bolsa en la espalda indica que tiene todo lo que necesita para ser feliz, solo tiene que parar y desempaquetar esa bolsa. Está en el camino de un nuevo comienzo. Sin embargo, esta carta tiene una advertencia: hay que dejar de soñar despierto y de fantasear, hay que vigilar los pasos que uno está dando, para no caer y acabar haciendo el tonto.Hay que aprender de los errores; las decisiones que tomes en el tema por el que está consultando, marcarán un nuevo rumbo en su vida y puede que la de otras personas también.
Cuando se tengan las ideas claras, se podrán ver las nuevas metas con mayor facilidad, aumentará la fuerza de voluntad y podrá superar cualquier temor que se presente en torno a ese tema. El trabajo duro, la honestidad y la ética son lo más importante; el uso de la sabiduría y de la confianza en el matrimonio y en las relaciones proporcionarán una base firme sobre la que trabajar.
El nombre esotérico del Loco es “Amor“, que representa “Bueno” y que enseña cómo se debe pasar de actuar prominentemente con un uso del conocimiento, a una manera de actuar más basada en el amor.
SUEÑOS: El Sol
El Sol es una carta de consecución de nuestros proyectos. La buena suerte alumbra nuestro destino y en los próximos pasos estaremos iluminados por la luz que bendice nuestro camino.El Sol alerta sobre proyectos exitosos, la firma de acuerdos profesionales muy favorables a nuestros intereses.
También es una carta que se refiere a la felicidad conyugal. La relación con nuestra pareja funcionará mucho mejor que ahora. Puede referirse a niños y a la felicidad con y gracias a ellos.
Un tiempo positivo se presenta ante nosotros. El Sol nos sonríe, no debemos tener miedo.
Finalmente, puede referirse a la salida de un tiempo de oscuridad, recuperación exultante tras unos momentos que podemos considerar negativos.
Puede referirse simplemente a un viaje próximo al Sol, tal vez unas vacaciones en la playa.
PAREJA: El Emperador
El emperador simboliza el deseo de control sobre el entorno, y su aparición en una lectura a menudo sugiere que el tema tiene que aceptar que algunas cosas no pueden ser controlables, y otras no podrán beneficiarse de ser controladas.Como ocurre con todas las cartas del Tarot, son posibles múltiples significados. Mientras que la Emperatriz es el principio femenino, el Emperador es el masculino. La mayoría de los individuos se relacionan con esta carta de la misma manera en que se relacionan con su propio padre.
Llegar a ser algo, conseguir conocer algo y ser capaz de algo es lo que dota a una persona de autoridad. Conservar el equilibrio interno y la riqueza inagotable, debe extraer solo las cosas necesarias, tanto espirituales como materiales. Espiritualmente, aspirar a metas más altas. Mentalmente, construir un conjunto lógico y práctico de los planes. Físicamente, actuar sobre los objetivos y planes. Emocionalmente, utilizar el coraje para motivarse a usted mismo y a alcanzar sus propuestas.
SEXO: El Juicio
La carta alerta sobre un importante cambio en nuestra vida. Estamos ante una posible iluminación, el encontrar el nuevo camino a seguir. El encuentro de una persona con su vocación.El Consultante puede encontrarse en una encrucijada de su porvenir. Tiene que elegir entre dos alternativas. El Juicio alerta sobre la inevitabilidad de una de ellas.
Las mentiras y los engaños del pasado salen a la luz: ha llegado el tiempo en que a todo se hará justicia. Pero con un ánimo enfocado en el perdón, en un nuevo comienzo.
La carta también representa la búsqueda de la identidad de uno mismo. Se espera ese momento en que uno se encuentre ante el camino correcto.
AMISTAD: La Luna
La Luna es la carta de lo oculto, lo ignoto y desconocido. Puede en ese sentido reflejar engaños, ocultaciones, mentiras. Pero también referirse al mundo de lo inconsciente: fuerzas psíquicas que escapan a la razón. Para una persona que necesite de la imaginación y la fuerza mental, la Luna es un gran refuerzo en su labor.La Luna representa nuestros miedos: a la oscuridad, a la noche, a los animales, a nosotros mismos.
Es una carta muy femenina, el comportamiento a veces irracional, siempre muy emocional, de la mujer cuando se encuentra bajo presión. Esta emotividad y capacidad intelectiva superior pueden explotarse en el mundo de las ciencias del alma: las visiones que escapan a la razón no siempre resultan negativas.
La carta puede referirse a un viaje a través del mar, de larga distancia. Las consecuencias en el mismo son desconocidas.
La carta se refiere a todo lo relacionado con la noche. Puede significar en ese sentido conocer a tu pareja en una salida nocturna, o que sea una persona que trabaja por la noche.
FUTURO: La Rueda de la Fortuna
La Rueda de la Fortuna alerta sobre cambios importantes en el futuro. Ante esos cambios, nuestra situación puede ser como la de cualquiera de las criaturas que en ella se posan: podemos salir beneficiados y subir, podemos salir perjudicados y bajar o tal vez mantenernos en nuestra posición.La situación de cambio va a ocurrir. Ante ella debemos estar preparados, según nuestra situación considerar si sólo podemos aspirar a mantenernos donde estábamos. O tal vez sea la gran oportunidad que siempre añorábamos. La Rueda va a girar y es importante darse cuenta de esa oportunidad.
En muchos casos puede referirse a un suceso que vemos hacia el que estamos predestinados. Por ejemplo, por una experiencia que hemos vivido muchas veces en sueños y hacia la que sentimos que se encamina nuestra vida. La Rueda está indicando que ese momento va a llegar.
Del mismo modo se puede encontrar una pareja que uno sienta que es “la elegida”, una persona de gran compatibilidad. Esta sensación, más que la compatibilidad en sí misma, es la que alerta la Rueda de la Fortuna.
También puede significar un golpe de suerte, un premio en una lotería.